¡Hoy toca ser felíz!

Es difícil escribir una nueva historia cuando crees que un capítulo de tu vida se ha cerrado para dar inicio a otro. Cada uno de nosotros somos escritores de nuestra propia historia y muchas veces esta toma un giro inesperado, como de aquellos cambios que suceden de un día a otro, de un momento a otro. Un día estas fuerte y otro día estas debil, un día sientes que lo lograste y otro día sientes que estas perdiendo. Las batallas no tienen horario ni tienen días, pues cada día es un nuevo punto de partida en el que defines el título de tu historia y el capítulo de hoy. 

Ha pasado un tiempo desde que regresé de ese inesperado pero necesario viaje a Suecia, sin duda la experiencia más dura y difícil de mi vida que aún se mantienen latente como si hubiera sido ayer. Es extraño saber que otro año se va pero los recuerdos mas resaltantes se quedan. No dejo de agradecer a Dios y la Virgen por esa oportunidad tras tanta lucha de poder tener días de tranquilidad sabiendo que estoy casi controlado.

Con el tiempo uno aprende a valorar más la vida, a disfrutar de cada cosa que haces, de quedarte mirando puntos que no parecen tener poco significado en las calles pero que tú haces que parezcan importantes. Sin duda para los que batallamos vivir un día más es como vivir años y vivir un año es como vivir una eternidad.

Pero cada batalla es diferente, cada lucha tiene su propia historia, y cada protagonista tiene una diferente que contar y es increible cuando empiezas a buscar guerreros y te das cuenta que existen mucho más de los que puedes imáginar y cada uno tiene una lucha completamente diferente a otra aunque parezcan similares.

Recuerdo que era de noche cuando recibí un mensaje del blog. Era de una increible guerrera que me contaba su historia, luego de haber visto el reportaje en TV. Me parecía increible encontrar a alguien que tenía los sintomas similares, historia clínica similar, exámenes similares y hasta resultados similares pero con un diferente desenlace.

Es una guerrera llamada Ana María, sin duda alguna, una "Guerrera Incansable", pues ella venía batallando duramente con una seríe de sintomas que la alejó de su rutina diaria laboral y personal. Una guerrera que inició su batalla a los 47 años en el año 2001 cuando luego de tantas revisiones, vueltas, errores y omisiones le diagnosticaron Cancer Pancreatico Neuroendocrino con Met Hepáticas. Si el nombre es increible, lo más increible es la sobrevivencia por 11 años que enfrenta esta guerrera.

Ana María me hizo recordar a ese Guerrero Legendario de nombre Antonio quien afronta dúramente el Sindrome Carcinoide, un fiel reflejo de lo dura que se pone la enfermedad y lo fuerte que debemos ser para enfrentar este tipo de batalla.

Al conocer la historia de Ana Maria "La Guerrera Incansable" inicié una pequeña búsqueda para tratar de visitarla personalmente. Es ahí cuando me entero que la operarian en una clínica a la que pude acudir para poder conocer su historia en persona. Y así fue, tras una serie de orientaciones pude llegar a ver a esta guerrera, quien le habían hecho una Thermo Ablación por Radiofrecuencia y de milagro habían logrado localizarle la serie de tumores malignos para poder extirparlos. Era increible poder ver a una guerrera que compartía sintomas y tratamientos conmigo. No podía creerlo, me daba mucha emoción, ilusión y cariño.

Hoy nuestra guerrera disfruta de una recuperación con un excelente semblante y el apoyo de su incondicional familia, quienes estuvieron en todo momento a su lado, inclusive hasta para alcanzarle la comida (fui testigo en persona cuando Ana no quería comer la comida y estabamos haciendo cola para "probarla").

Esto me permitió ver como este tipo de enfermedades pueden jugar duramente con tu vida, cómo pueden hacerte sentir debil y a la vez tan fuerte, cómo pueden hacerse notar con un pequeño sintoma para recordate que aún vive contigo e inclusive cómo puede engañarte haciendose pasar por dormida cuando por dentro empieza a hacerte daño.

Pero es así guerrero, la lucha no solo es externa, la lucha es interna, no solo los tratamientos, cirugias, visitas y consultas son las que te alivian, la lucha más fuerte es la que debes enfrentar cuando te encuentras contigo mismo y aceptas que lo que vives no es un castigo, sino una bendición, un privilegio, un regalo.

El motivo por el cual decidí escribir aquí en el blog fue porque luego de 10 años, acepté que estaba enfermo, acepté lo que me tocó vivir, acepté que no era una persona normal. Pero cambie mi historia, decidí anteponerme a mi enfermedad, a este juego macabro de historias clínicas, visitas médicas, tratamientos, cirugias y enfrentamientos cara a cara con la muerte.

Pero hoy te digo: "Hoy soy feliz", pues hoy comprendí que esto íba más allá de una enfermedad, y ese más allá esta aquí, en esto que juntos leemos, recordamos y compartimos, esta pequeña tarea en la que tu eres participe con tan solo leerla y saber que hay muchos guerreros en el mundo librando su batalla, sin importar el tipo que esta sea o la situación por la que atraviese.

Esto me hace recordar a otro guerrero llamado Nestor, quien desde hace unas semanas viene librando una dúra batalla; la misma que en un inicio jugaba con su vida. Este joven guerrero tuvo una caída muy peligrosa, un accidente que le puede ocurrir a cualquiera, por la cual tuvieron que realizarle una craneotomía. Su situación era muy delicada, el pronóstico era muy reservado, pero esto no fue motivo para que a este joven guerrero se le sume un ejercito de ángeles llamados amigos para que sean arma y escudo de su batalla, una batalla en la que cada minuto era crucial y cada segundo una eternidad.

Recuerdo que veía el brillo de los ojos de su madre adolorida pero con fe, y la fuerza en la mirada de un padre debilitado por dentro pero esperanzado por fuera. Ambos sabían que Nestor íba a salir de esa crítica batalla, de esa dura realidad que hoy les tocaba vivir; una realidad que demoraría meses pues la recuperación es bastante larga, pero la unión de ese ejercito, las oraciones a cada momento y esa fuerza y fe de sus padres, hermanas y familia fueron escuchadas y ese joven guerrero pudo salir adelante.

Hoy Nestor continua batallando duramente por la recuperación, cada batalla toma tiempo y cada día para cada guerrero es como una eternidad de acuerdo a la batalla que nos tocó vivir.

Y es así guerrero, ¡cada día es una bendición!, ¡cada día es un nuevo comienzo!, una nueva batalla y solo podrás enfrentarla si estás dispuesto a lucharla, no importa la situación en la que estes ni lo dificil que parezca batallarlo, lo importante es que creas que cada día de tu vida, ¡¡esta hecho para ser felíz!!.

 

¡Arriba Guerrero! ¡Enfrenta tus caminos!, dirige tus miedos, lucha contra la impotencia, demuestra que eres capaz de vivir para ti y vivir por los demás, demuestra que la fe y la esperanza lo pueden todo y por más dificil que parezca el camino o lo dificil que parezca atravesarlo, no bajes la cabeza, ¡levantala! , no disminuyas la velocidad ¡Acelera y sigue!, no te detengas ¡continua!, no tropiezes ¡mantente alerta! ¡Entregate a la vida!, ¡entregate a la lucha!, ¡entregate al poder de la fe! ¡al poder de la esperanza!.

 

Recuerda que estamos contigo y que cada batalla la luchamos juntos, cada logro lo disfrutamos juntos, cada oracion las oramos juntos, cada pena la lloramos juntos, no tengas miedo a caer pues estamos contigo para levantarte, no tengas temor de no lograrlo, pues estamos contigo para alentarte, no sientas pánico al batallar pues estamos contigo para ganar.

¡Vamos Guerreros! hoy es el momento de despertar, hoy es el momento de levantarte, hoy es el momento de decirte a ti mismo que si puedes, hoy es el momento de entregar esa fuerza, hoy es el momento de demostrar lo que puedes lograr y de lo que eres capaz de hacer, guiate por las señales de tu corazón, por las señales de la fe y la esperanza, por las señales que te dan los demás, aquellas señales que te enseñan a levantarte si te caes, a seguir adelante si te equivocas, a levantar la cabeza si sientes que no puedes más y sobretodo a entender que la vida es una sola y sea cual sea tu batalla siempre saldras victorioso si la luchas con el corazón.

¡Entregate a la vida! hoy decide vivir, ¡hoy decide luchar! hoy decide enfrentar tus miedos, a vencer tus obstaculos, a sonreir si no puedes, a secarte las lágrimas de la impotencia, a calmar tu dolor.

¡Hoy es el día! ¡hoy es el momento! ¡Hoy toca sonreir! ¡Hoy toca ser feliz!
 

 

 

"No olvides que siempre habrá una luz de esperanza hacia donde dirigirse y dejar las huellas necesarias para dirigir a otros" - Comparte el camino, comparte la vida, comparte la luz.

 

 

La vida es larga, el tiempo es corto. ¡A vivirlo!

 

Con Cariño

El Valiente Guerrero

 

 

 

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Dedicado a todos los guerreros que vamos conociendo en el camino, aquellos que conocimos, aquellos que conoceremos y aquellos que ya no estan.

 

A Nestor, por su fuerza y valentía para enfrentar su batalla.

A Ana María, por ser esa guerrera incansable preparada ante todo.

A Antonio, por ser esa guía para muchos y compartir sus experiencias.

A Vilma, quien se prepara para batallar.

A la pequeña Fatima, pues hoy vuelve a sonreir, hoy le tocó ser feliz.

 

 

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Gracias a mi familia.

Gracias a Diego y Meche, quienes continúan haciendo las labores recorriendo américa. (www.compartiendoamerica.com.ar) ellos pueden estar en tu país, conócelos!

Gracias a Plus Tv y Media Networks: al programa Cuidate Mucho y su equipo periodístico encabezado por Mercedes Cardoso, por permitir difundir casos especiales de guerreros en batalla, como la mía.

Finalmente, Gracias a ti, por tu tiempo, tu mensaje y tu oración.

 

 

Seguimos en batalla...